Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de diciembre, 2010

Lo que pienso de los españoles y de los venezolanos

No sé realmente qué tal la pasan el resto de los inmigrantes del mundo, pero yo, a pesar de todo lo bueno que tengo, la estoy maltripeando a medida que pasan los años y yo sigo del otro lado de la orilla. No sé si este sentimiento de transitoriedad incómoda dure para siempre. Hay veces que me desespero, porque siento que me hace tanta falta hablar con mis padres, abrazarlos, al menos, y no puedo. La vida del inmigrante se teje con unos estambres de nostalgia e impotencia. No sé si esto sea igual para todas las personas que viven y sienten fuera de su tierra, para mí, se hace un poco más difícil porque entiendo que probablemente no haya posibilidad de regresar. Me gustaría hablar con aquellas personas que emigraron a otro país a partir los años sesenta, preguntarles qué se siente. Pero yo sé qué se siente, solo quiero espejarme, cuadrarme y verme con forma, sin distorsión desde el otro. Siento el miedo y un poco de rabia por entender secretamente que ese país de donde vengo es un patu